Crónica del Cryptshow Festival 2013

          Por séptima vez consecutiva, Badalona fue punto de encuentro para amantes del terror, la fantasía y la ciencia ficción. En El Círcol y alrededores tuvieron lugar numerosos eventos como proyecciones de largos y cortos o presentaciones y mesas redondas con todo tipo de invitados, desde productores y directores hasta intérpretes y distribuidores.

 

DÍA 1 – APERTURA Y DISTRIBUCIÓN ONLINE

 

          The valley of Gwangi (El valle de Gwangi, Jim O’Connolly, 1969) fue la cinta que abrió el festival en homenaje al reciente fallecido Ray Harryhausen, responsable de los efectos especiales de películas del género tan memorables como Jason and the argonauts (Jasón y los argonautas. Don Chaffey, 1963) o Clash of the titans (Furia de titans. Desmond Davis, 1981). En ella, se pudo disfrutar de criaturas prehistóricas generadas mediante un stop-motion excelente, pese a que la historia principal careciese de originalidad.

 

       Tras la proyección, en el restaurante Can Frai tuvo lugar la mesa redonda de esta edición: Mercados alternativos y distribución online. La charla contó con la participación de Pablo Menéndez, fundador de la distribuidora Marvin&Wayne; Moisés Tuñón, fundador de Festhome LTD; y Quim Crusellas, productor de numerosos programas y actos. En ella, se debatió sobre el panorama actual de la distribución y exhibición centrándose en los cortometrajes. Durante una hora se comentaron varios puntos de vista, aunque, más allá de la puesta en común sobre un tema tan delicado, no se pudo sacar ninguna conclusión en particular al respecto.

 

          Por otro lado, y al mismo tiempo, la competición de cortometrajes dio el pistoletazo de salida en El Círcol con la primera tanda de pequeñas producciones. Ésta contuvo: Y la muerte lo seguía, producción española de género western clásico; Literalmente, tira cómica animada que se llevó la Mención especial del jurado “porque los cortos de un minuto también pueden ser brillantes”; Presence required, historia de fantasmas con un toque de humor negro ganador del premio Mejor guión; Les dinosauries pleurent aussi; Tin & Tina; Baby, I love you; Tus gritos me dan risa; y el giallo Yellow, que pasó por Sitges con buena acogida y aquí se llevó el premio Mejor banda sonora.

 

         Acto seguido vino la segunda tanda de cortos, en la cual se pudo ver Vencidos, drama nacional rodado en inglés y correctamente ambientado en una saga cinematográfica muy popular; Chilly, la historia de un asesinato con estética animada de los cincuenta; Till death do us apart, comedia romántica aderezada con zombies; Rubik cube terror, algo parecido a Rubber (Quentin Dupieux, 2010) pero con un cubo de Rubik y violación gratuita; Con la comida con se juega, otro corto español con un giro de guión final por el cual recibió muy buena acogida y ganador del premio Mejor actriz; O membro decaido, producción brasileña que retrata la aburrida rutina de un asesino en serie sin mostrar ningún rostro; El otro, historia sobre la esquizofrenia que transcurre en una montaña nevada excelentemente rodada; y Mr. Bear, humor negro británico con un personaje vulgar en una situación muy inusual que recibió muchos aplausos por parte del público y obtuvo el premio Mejor actor.

 

 

 DÍA 2 – RODRIGO GUDIÑO

 

          El pequeño ensayo documental Dracula vs Vampir abrió la sesión y únicamente mostró las diferencias, sin dar demasiada información, entre las cintas El conde Drácula (ídem, Jesús Franco, 1970) y Cuadecuc, Vampir (Pere Portabella, 1970), ésta segunda, filmada durante el rodaje de la primera con la intención de hacer su making of. Tras éste, tuvo lugar una doble sesión del director mejicano Rodrigo Gudiño, fundador de la revista Rue Morgue. Primero se proyectó el cortometraje The facts in the case of Mister Hollow, una animación sobre una única fotografía con numerosos planos por los cuales se desplaza la cámara, y The last will and testament of Rosaling Leigh, cinta de ritmo lento pero con una ambientación espectacular mediante un solo actor y una casa antigua decorada con ángeles como única localización.


          En la tercera sesión de cortometrajes a competición se pudo ver El ogro, cómic animado que no pasó de ser una curiosidad; Caterwaul, que obtuvo el premio Kifund y mostró una historia sin apenas diálogos entre un pescador y su presa adoptada; At the formal, peculiar plano secuencia con giro de guión final que ganó el premio de Mejor director; Efímera, un chute de realismo mágico mezclado con humor negro que combina a una niña bailarina y un grupo de sicarios mafiosos; Le colocateur, historia aparentemente cotidiana cuyo director, Nicolas Monfort, estuvo presente durante todo el festival; y Zimmer 606, mágica historia sobre pequeños hombrecillos responsables del funcionamiento de la habitación de un hotel y el deseo de uno de ellos de ser libre.

 

          La cuarta sesión, mucho más animada y divertida debido a su contenido de menor duración, contuvo Castidermia, un slasher nacional sobre un obsesionado con la taxidermia y el ser humano; Anyone, pequeño diálogo entre dos amigas aparentemente inocentes; Bariku light, gore vasco gratuito con ligera crítica a la telebasura que provocó muchas risas y recibió bastantes aplausos tras su proyección; Bendito machine IV, cuarta parte de una serie de cortos de animación en dos dimensiones sobre los problemas del mundo actual y sus consecuencias; Cabbagemincer, regular cinta rodada como una película muda de los años veinte sobre un cortador de coles y una mujer; 2OS, micro corto del estilo Notodofilm que durando sólo treinta segundos, consiguió risas y animó la sesión; Les tutos de la vie, divertido tutorial para niños sobre qué hacer en caso de que un asesino en serie se presente en la puerta de tu casa; Neomorphus, breve stop-motion surrealista que dejó indiferente a todo el público; Sunset day, sorprendente producción española que, con un guión aún más elaborado podría pasar por largometraje salido de Hollywood; Trash, extraño relato sobre un vagabundo que planta mujeres; y Frost, historia acerca de la supervivencia del ser humano ganadora del premio Serra Circular al Mejor cortometraje.

 

          Bien entrada la noche se pudo disfrutar del monólogo Muertos de risa por parte de Jordi Merca que, pese a llenar El Círcol por completo durante una hora, empleó un humor que no se dirigía a los espectadores habituales del festival, sino más bien al público más usual.

 

 

 

DÍA 3 – THANATOMORPHOSE Y MOLINS CONTRA FANTOSFREAK  (SEGUNDO ASALTO)

 

          Un chico de portada, pequeño y simple documental sobre Macario “Mac” Gómez, ilustrador de más de dos mil carteles a lo largo de cuatro décadas, fue la primera proyección del día. Sin embargo, el plato fuerte del festival llegó a continuación: Thanatomorphose (Éric Falardeau, 2012). Esta cinta de terror psicológico sobre cómo una mujer presencia el lento proceso de descomposición de su cuerpo, llenó El Círcol y sorprendió a la mayoría de espectadores con unos magníficos efectos visuales y un gore bien empleados y nada gratuitos. Tras su visionado en El refugi tuvo lugar la presentación del DVD de la película, editada por primera vez en España y que agotó todas las unidades a lo largo de la tarde, por parte de Tyrannosaurus Entertainment, Almas Oscuras y el mismo Falardeau. Entre preguntas y respuestas, curiosidades y risas, se pudo apreciar el trabajo conjunto de numerosas personas con un mismo interés.


          Durante la presentación del DVD de Thanatomorphose tuvo lugar la quinta sesión de cortos a competición: Animal within, con una excelente fotografía; Heritage, supuesto slasher francés; El martillo de las brujas, relato clásico sobre brujería; Le portrait, un caso de asesinato con humor negro; El castigo, animación stop-motion minimalista; Sisters, producción fantástica sobre una chica que busca a su hermana desaparecida; La noria, más animación para mostrar la historia de un padre para el cual el tiempo se detiene mientras busca a su hijo; Hambre, oscuro relato sobre una madre y cómo ésta alimenta a sus hijas; y Abiogenesis, animación en tres dimensiones de ciencia ficción y con un nivel artístico destacable.

 

          La sexta tanda de cortos contuvo The animation tag attack, curiosidad animada en la cual se cambia el estilo de animación cada treinta segundos; Molecular zombie, una de las proyecciones más divertidas del festival, nacional y combinando imagen real y en stop-motion, sin pretensiones y con la única intención de divertir; Y serás recompensado, ambientado como un capítulo de La Dimensión desconocida pero con un cambio radical de cara a su final; Nostalgic Z, más zombies grabados cámara en mano pero con una pequeña e inesperada crítica hacia los banqueros que se ganó los aplausos de toda la sala; Exclusion zone, otra historia más postapocalíptica, vírica y minimalista que provocó indiferencia; Cold turkey, o cómo un caníbal intenta, de manera frustrada, dejar de comer carne humana; y Hotel, sorprendente a nivel visual, pero quedándose en otra historia más con giro de guión y que, aún así, recibió el Premio del público.

 

          Repitiendo el evento que tanto gustó el año pasado, por la noche tuvo lugar la Lucha de programadores en Can Frai. Una vez más, Roger Sàbat, programador del Festival de Cine de Terror de Molins de Rei y Rafa Dengrà, director del Festival Fantosfreak, se enfrentaron el uno al otro mediante cortometrajes que han pasado por sus festivales. En esta ocasión, Dengrà se ganó los vitoreos de una sala repletada de más de cincuenta personas gracias a Charlie the unicorn.

 

 

 

DÍA 4 – MUERTOS VIVIENTES ASIÁTICOS

 

          El sábado, día en que Cryptshow contiene más programación, se pudo ver todo tipo de proyecciones para todos los gustos (siempre de género, claro). Primero, el penúltimo bloque de cortos en el cual predominaba la animación y que estuvo dirigido a un público joven con: Necrolovers, con un demente recién escapado de un manicomio y dos ladrones de tumbas; Zombirama, animación argentina con zombies y una crítica a la dictadura que sufrió dicho país; El vendedor de humo, nominado al Goya 2013 y con un vendedor ambulante que logra engañar a todo un pueblo; Shave it, o qué sucedería si un mono lograra afeitar todo su cuerpo y hacerse pasar por humano; Luminaris, relato ambientado en un mundo en el cual todo depende de la luz; Beerbug, mas animación sobre un cazador sacado de quicio; y The captured bird, fantástica historia con una niña como protagonista y testigo del nacimiento de seres especiales.


          Tras los cortos se presentó la serie de animación en tres dimensiones Tikis & Mikis, con un tigre y un alienígena como protagonistas y orientada también hacia un público juvenil. Su director, Salvador Simó, el músico Agustí Busom presentaron el primer capítulo y éste tuvo buena acogida pese a lo poco llena que estuvo la sala durante la mañana del sábado. Mientras tanto, en la librería Saltamartí tuvo lugar el vermut literario anual, ésta vez con los autores Marc Pastor (La mala dona, 2008), David Roas (Celuloide sangriento, 1996) y Sebastià Roig (Ullals, 2011).

 

          The grave bandits (Los ladrones de tumbras, 2012), cinta tailandesa de ligero gore zombie y aventuras con niños, abrió la tanda de proyecciones de la tarde. La película saltaba completamente de la diversión macarra proporcionada por dos infantes ladrones de tumbas a horribles clichés moralistas que no venían a cuento, ralentizaban el ritmo y disminuían la diversión. Tras ésta, llegó el último bloque de cortometrajes a competición.

 

          En él, se pudo disfrutar de: El nido, otro futuro pesimista protagonizado por dos niños aislados en una casa de montaña debido a un supuesto virus; El tiempo de la luz, breve corto extremadamente fantástico acerca de las bombillas; Horizonte, otra historia postapocalíptica, aunque, curiosamente, con vampiros y dotada de una fotografía destacable; Dintre meu, pequeño sketch que despertó las risas de los asistentes; Death of a shadow, nominado a los Oscar 2012 y ganador del premio a Mejor fotografía, narró una tenebrosa historia ambientada en el limbo entre la vida y la muerte y protagonizada por un soldado a punto de finalizar su tarea para poder salir de él; Love wars, breve historia sobre política y homosexualidad ambientada en el universo de Star wars; Fist of Jesus, de los responsables de Brutal relax, gore a mansalva tras una fallida resurrección de Lázaro por parte de un Jesucristo ligeramente distinto al habitual; Maldición, inesperado cruce entre La Bella durmiente y Resident evil: Perfect drug, surrealista cine negro que se llevó el merecido premio de Mejores efectos especiales; y Pelle Plutt, obra narrada mediante una canción que cerró el bloque provocando risas y aplausos entre el público.

 

          Reipu zonbi: Lust of the dead (Zombis violadores: La lujuria de los muertos, 2012), película japonesa con un ritmo muy irregular que sustituye los habituales muertos vivientes por hombres con sobredosis de testosterona que sólo quieren violar a mujeres, fue la última proyección del día. Alternando gore, crítica hacia el sexo masculino, pequeños sketch y escenas lésbicas eróticas, el público nocturno se entretuvo pese a no poder ver el final de la cinta debido a inevitables problemas técnicos. Aun así, mereció la pena para poder ver, ésta vez en pantalla grande, Charlie the unicorn y Los putos tratrerrestres. Algo así, es único e irrepetible.

 

 

DÍA 5 – JACK TAYLOR Y CLAUSURA

 

          El último día del festival estuvo completamente dedicado al veterano actor Jack Taylor. Se proyectaron dos obras que coprotagoniza: El ladrón de cadáveres, capítulo de la breve serie de TVE El quinto jinete (1975-1976) y adaptación del clásico cuento de terror de Robert Louis Stevenson y Dr. Jekyll y el Hombre Lobo (León Klimovsky, 1972), sexta entrega de la saga del hombre lobo Waldemar Daninsky interpretado por Paul Naschy. Ambas películas, sobretodo la segunda, despertaron la simpatía y las risas de la mayoría de asistentes. Tras éstas, comenzó la gala de clausura del festival, aderezada con tres números musicales por parte del dúo cómico The Xuscos. Después de un vídeo retrospectivo y una tanda de preguntas, respuestas y anécdotas, se le entregó el Premio Honorífico de este año a Jack Taylor, quien lo recibió con el entusiasmo y la simpatía de alguien por quien no pasan tanto los años.


          Después de que el jurado compuesto por Héctor Claramunt (actor y guionista), Daniel Ausente (escritor sobre el fantástico y el cómic), Xavi Pons (crítico de cine y música), Anna Solanas (cortometrajista de animación) y Jordi Sánchez (profesor e investigador) anunciase todo el palmarés, se proyectaron de nuevo Frost y Hotel, ganadores de los premios a Mejor cortometraje y Premio del público, respectivamente.

 

          En conclusión, el Cryptshow Festival continúa siendo uno de los festivales más humildes dentro de panorama de terror, fantasía y ciencia ficción. La oferta, repleta de todo tipo de actividades (proyecciones de cortos y largometrajes, presentaciones, exposiciones, charlas, etcétera), cuesta ser ignorada e incluso merece la pena asistir tan sólo por el ambiente que crean todos los asistentes, dentro y fuera de la sala. En definitiva, esperando el año que viene con ansias.

 



Por Iban Granero