Quince años de noches de cine oriental en Vic


Fieles a la cita anual en Vic, empezamos el festival con la ilusión de celebrar con la familia cineorientalfilica otra edición cargada de sorpresas, diversión y el lo mejorcito del cine asiático.


Aterrizamos con la tormenta de “Heroes Unite” desplegándose por todo el cine vigatà junto con las risas y efusivos aplausos de los espectadores, tanto infantes como adultos, los cuales además pudieron completar su visionado con un display de sus protagonistas, de esta guisa:



Tras el gran show y recogiendo las sendas caras de satisfacción de los asistentes, asistimos a la siguiente sesión, “Love on delivery” dentro de la retrospectiva al enorme Stephen Chow.

 



 

 

Esta comedia es capaz de dar la vuelta a cualquier otro film del mismo género que se le ponga por encima, acudiendo, como siempre hace este increíble autor a gags nada previsibles que al tiempo denotan las idiosincrasias de un subgénero como el de artes marciales, el de boxeo (claramente con “Rocky” como referente absoluto) o el propio estilo oriental de las películas, véase la mofa a los flashbacks de escenas que no hace ni un minuto que han ocurrido. En resumen, una de las mejores comedias del director conocido internacionalmente por “Kung Fu Sion” y que nos demostró con su último film “The mermaid” que, no sólo no ha perdido “el toque” sino que sigue sacando jugo a la temática más dispar para crear una comedia redonda.


El día ha empezado de excelente forma y seguimos con la presentación de “Shocking Asia”, el bookcine escrito por Domingo López, el mismísimo programador del festival, seguida del mockumentary “Top knot detective”, esta premiere española es un falso documental acerca de la gloria y descenso del autor y protagonista de una serie de un detective samurai que nunca existió. Esta producción, dirigida por canadienses, muestra por un lado el efecto fandom que las series pueden llegar a generar y cómo la fama y el éxito conlleva traiciones y excesos difíciles de salvar. Buena factura y mucho humor para una historia sacada de la nada y de la que dan ganas de que se vuelva realidad.



 

 

Con tremendo subidón seguimos con “Stained” un capítulo piloto de una miniserie hongkonesa protagonizada por Kara Wai y con la aparición estelar del ya mítico Anthony Wong. La sesión nos reporta una trama al puro estilo de cine negro actual en el que se mezclan intrigas paralelas y futuras. Aunque bien ejecutado y con un diseño de producción envidiable, no podemos dejar de ver sendos tropiezos tanto en el desarrollo de la historia como en el desenlace del misterio principal, harto expositivo y extremadamente lleno de pornografía visual/gore. Por mucho que aleguen reminiscencias de films de mismo talante, la forma en la que dichos elementos se introducen es poco acertada y carente de tensión o emoción.

 





Les bassa nos espera y entramos con gran expectación ante el espectáculo del país de hoy, China así como por la presentación de la segunda entrega de “Monster Hunt”, la cual pudimos disfrutar antaño en este mismo festival.

En esta ocasión se les une el inmenso Tony Leung, acompañando a Wuba en una nueva aventura en busca de sus queridos padres humanos. Un nuevo y temible villano está en la sombra y quiere conseguir a este encantador monstruo a toda costa para averiguar si su destino se cumplirá.




 

 

Fieles a la factura de la primera entrega e intentando subir un nivel tanto por elenco como por desarrollo de historia, esta segunda entrega cumple con creces sus objetivos.





Empezamos un nuevo día con una excursión en kayak cortesía del festival en la que pudimos recorrer el Pantà de Sau y refrescarnos, pese a que no pudimos disfrutar de la programación del festival hasta entrada la tarde.


Y gracias a nuestra pronta y nada accidentada vuelta pudimos disfrutar de, personalmente, el mejor film del festival: “The looming storm”.



 

Cáustico drama chino en el que la crítica a su país es tan veraz como crudenta. El ambiente frío y lluvioso es tan opresor que deprime por momentos y la simbología tan abrumadora que bien merece un segundo visionado.

La esperanza es un mito, las ilusiones son vanas y todo intento de los protagonistas de tener una vida diferente se difuminan sin remedio. Dos escenas “nevadas” dan el gran significado a la historia que dista de ser un thriller, siendo este género un mero contexto, una gran metáfora. Sencillamente imprescindible.


Con este gran sabor de boca seguimos con la jornada para seguir deleitándonos de otra sesión en las bassas, hoy le toca el turno a Tailandia y gracias a ello tenemos el placer de disfrutar tanto de una cena típica así como una extraordinaria demostración de Taekwondo, al tiempo enérgica y excelentemente coreografiada.

 



 

Y a la postre le llega el turno al film del día “Bad genius” precedido de un cortometraje.

El film trata de un tema tan común que el simple planteamiento lo hace muy original: copiar en exámenes. El tratamiento es casi como si estuviéramos en una película de superhéroes con impresionantes escenas y una tensión creciente. El escollo reside en el mensaje del film que deviene en un drama social sólo esperanzador por la parte de la protagonista, pero que quizás pone de manifiesto una carencia en las bases de la propia sociedad. En todo caso, es un film muy entretenido y da muy buenas ideas para nuestros próximos exámenes… No es de extrañar que gustara tanto.





Tomándonos una merecida pausa nos preparamos física y mentalmente para una nueva entrega del “Tetsudon” y como correctamente dice su título “los foolish adults” nos asentamos para intentar sacar el mayor partido a una sesión bizarrapornodestroyer donde las haya presentada por el ya mítico Reji Hoshino, otra de las almas del festival, y bajo el ya lema “¡Quiero mi dinero!”. Poco más que aportar ante este desmesurado uso de las imágenes más que un rato de risas aseguradas.






Con un nuevo amanecer llega el cierre de la retrospectiva de la presente edición con “Soccer Killer” una extraña mezcolanza entre cine tradicional, acción americanizada y comedia absurda que recuerda por su temática futbolera, por supuesto, a Stephen Chow.




Precisamente esta combinación es harto perniciosa para el film, pues deviene en algo tan difícil de superar que hace que el interés decaiga por mucho que se intente solventar con muchos gags.


Seguimos con una Hongkonesa romántica que recuerda a Romeo y Julieta en tanto que cuenta la historia de dos jóvenes que se enamoran y el destino los separa inevitablemente.


 

La ilusión del primer amor es combinada con la astrología, ciencia de la que ambos son apasionados y que sirve de contexto para darle más romanticismo a la historia junto con la comunicación epistolar y la propia relación prohibida que mantienen. A parte de lo naif de la misma, más cercana a épocas pasadas, la película es tierna y tiene momentos lo suficientemente bonitos como para llevarse un satisfactorio aprobado.


Llegamos al ecuador de la jornada con la excelente “The wrath of silence”, un film chino acerca de la lucha de clases desde un prisma refrescante y con toques de cine negro, thriller y drama costumbrista. Un árido film que da en el clavo en su gran parte.




Su mudo protagonista (algo sin duda sintomático de la línea del film) se ve inmerso en la búsqueda desesperada de su hijo, el cual ha desaparecido en las montañas. Sigue cualquier indicio y no piensa descansar ni pararse ante nadie, demostrando una dignidad sin límites, no dejándose amedrentar ni por el magnate más poderoso del lugar.

El film tiene un mensaje claro y alto acerca de cómo las clases altas pisotean sin miramientos a las bajas y como la egolatría y cobardía de estos no tiene parangón. Totalmente recomendable.


Debido a la amenaza de lluvia sobre Vic, tras la exquisita cena y los bailes típicos de la India, se decide mover el film de las bassas a la sede en el cinema vigatà, el cual se ha llenado para la diversión asegurada de “Baaghi 2”.

Como viene siendo tradición, esta es un tipo de superproducción india que nos ofrece tres películas en una: romántica musical, drama y acción pura.




Obviamente la parte de la acción es la que todo el mundo espera con ansias y no es para menos ante este portento de personaje capaz, casi, de incluso volar. A destacar las escenas más propias de una película de Rambo, las cuales son enormemente espectaculares, haciendo las delicias de todos los asistentes y mereciéndose sendos aplausos todas y cada una de ellas.

Una perfecta forma de cerrar las sesiones dedicadas a un país de las “Nits de Vic”.



Aun recuperándonos de tremendo film, entramos en la última sesión del día, otra gamberrada con concurso de Catolicsplay inclusive.





La temática es el erotismo y las obras de la noche cuentan con un corto y un largometraje. El corto “Mabo Kyan V” trata de una especie de power rangers con bragas por máscara y su batalla sexual contra los abusadores, poco más a añadir. El film por su parte no mejora mucho en argumento, con el sugerente y engañoso título de “Las monjas de las tetas grandes: Las bragas amarillas de la felicidad” trata de tres monjas que comparten piso y que regentan un bar por la noche. Como monjas se dedican a satisfacer a todo aquel que toca a su puerta y ya os podéis imaginar como acaba la cosa. Como detalle comentar que sospechamos que las bragas amarillas no son más que una forma de poner bragas en el título, poco más…


La nueva y tristemente última jornada arranca y no podría hacerlo de mejor forma que con “The golden monk”, una coproducción hongkonesa-china que combina perfectamente la fábula, la acción y estupendos efectos especiales en un conjunto delicioso.

El planteamiento de la historia, con dioses terrenales inclusive, es inusitadamente motivadora y la aventura que se propone, venciendo a monstruos y formando equipo, satisface completamente.


 



Por momentos recuerda a la historia del rey mono, salvando las distancias, pero siguiendo esa ilusión de narrar una historia entrañable, romántica y con metáfora incluida, cosa de la que este tipo de films no deberían alejarse por muchos efectos especiales que quieran primar.



Seguimos con otra fábula con “Namiya”, film navideño Chino con la presencia de un Jackie Chan de lo más entrañable (pues de lo carismático nunca se ha desprendido).

Este cuento de realismo mágico, aun basándose en un libro, nos recuerda a lo que acontecía en “La casa del lago” pero contextualizado en una tienda y compuesto por una coral de historias cruzadas a caballo entre pasado y presente.




Todo versa alrededor de un centro de huérfanos y de cómo los consejos que quieres y anhelas escuchar pueden ayudar a cambiar vidas. El envejecido Chan es el alma de un buzón maravilloso que es capaz de atravesar las líneas del tiempo y así hacer perdurar la esperanza en el futuro, un futuro con buenas bases que es tan necesario.


Tras esta deliciosa película le llega el turno al concurso más esperado de la semana, la primera edición del Vicsudon.

Ya por el nombre os podéis imaginar la temática y la calidad exigida para este concurso de micro cortometrajes y la cosecha ha estado a la altura. El palmarés fue escogido por mayoría popular y fue tan justo como se esperaría.






Y tras esta confusa sesión acabamos el festival con “Fist and Faith” un extraordinario trabajo inspirado en “Crows Zero” pero de radicalmente opuesto origen ya que se trata de una cruda crítica del imperialismo japonés desde tierras Chinas, y es de lo mejorcito que podríamos ver al respecto como cine mainstream.


La historia transcurre en la China ocupada por los japoneses, bajo el yugo de un orden militar que quiere destruir toda cultura autóctona imponiendo la suya cual régimen nazi. La parte de “Crows” se halla en que el grupo que domina, cual mafia, el instituto se involucra en la defensa de unos grupos disidentes que simplemente se reúnen para mantener viva su cultura silenciada.



Ya con los títulos de crédito, al puro estilo hard comic, te ves completamente entregado a este film que usa una violencia extrema ante una situación extrema y lo hace de una manera contundente y nada infantil aun siendo sus protagonistas unos adolescentes. Totalmente imprescindible.


Una perfecta guinda para dar el punto y final a una perfecta edición del Festival Nits de cinema oriental de Vic, ¡más activista que nunca!

Os dejamos, para finalizar la crónica, con el Palmarés de esta 15aEdición:


Premio del jurado

Colour of the Game (Kam Ka Wai, Hong Kong 2018)

Mención especial del jurado

The Cambodian Space Project: Not Easy Rock’n’Roll (Marc Eberle, Australia-Camboya 2015)


Premio del publico

Bad Genius (Nattawut Poonpiriya, 2017)


Premio de la critica

Bad Genius (Nattawut Poonpiriya, 2017)


Vicsudon

Primer premio: Kaiju Porquí de Ferran Carbonell.



¡¡¡Seguimos el año que viene!!!



Por Silvia García Palacios